- Quizás cuando era niño soñaba con ganar muchos trofeos con la selección de su Brasil natal, pero su estancia en Ucrania le hizo cambiar el color amarillo carioca por el amarillo de los "Zbirna". Y es que este mediocampista se nacionalizó para poder competir a nivel internacional, y con la selección ucraniana cumplió con quince apariciones.
Salió del fútbol brasileño para aterrizar en un país al que rápidamente se adaptaría. Entonces jugó para clubes importantes como el Dnipro o el Metalist, hasta que finalmente abandonó Europa para jugar en la Major League Soccer.
Se llama Edmar de Lacerda Aparecida (absténganse los bromistas), pero acabó cambiando de apellido al casarse con su esposa ucraniana Tetiana Halovska, por lo que nuestro protagonista pasó a denominarse Edmar Halovskyi de Lacerda, o lo que en cirílico ucraniano se escribe como Едмар Галовський де Лесерда.
Este mediocampista nació en Mogi das Cruzes (Brasil), el 16 de junio de 1980, aunque se nacionalizó ucraniano. Era un todoterreno incansable, un pulmón para el medio campo que recuperaba balones con una facilidad asombrosa. También solía jugar más adelantado, como volante ofensivo demostrando su talento anotador.
Imaginación y visión de juego para el centro del campo. Edmar tenía una clase inmensa, un toque de balón al más puro estilo carioca. Dar pases, hacer goles distribuir juego... El señor Halovskyi sabía hacer de todo, incluso lucirse con filigranas.
A mediados de los noventa empezó a jugar en el Independente de Limeira, conjunto del estado de Sao Paulo en el que comenzaría a jugar desde sus categorías inferiores. En 1997 daría un paso adelante en su carrera al debutar con el primer equipo, y sus actuaciones sobre el verde llamarían la atención de otros clubes brasileños.
Edmar acabaría fichando por el Paulista a principios del siglo XXI. Durante una temporada solamente tuvo quince apariciones en las que convirtió un par de tantos. De ahí pasaría al Internacional, con el que jugaría una treintena de partidos y haría siete goles.
Se trasladó a Ucrania en 2002 y se estableció en Simferopol, ciudad en la que conocería a su futura mujer. El mediocentro se adaptaría de forma sorprendente a la fría Ucrania, tanto a su cultura y sus costumbres como a su fútbol.
Fichó por el SK Tavriya y en este club militó durante cinco temporadas. Edmar sorprendió con su fútbol y se hizo un hueco en la titularidad. En su larga estancia en la escuadra de Simferopol sumó más de un centenar de partidos y consiguió dieciocho goles, algo que no pasaría desapercibido para otros clubes ucranianos.
En 2007 ingresó en las filas del Metalist Járkov, donde también pasaría bastante tiempo, concretamente ocho temporadas. Con este club vivió un poco de todo, como por ejemplo asistir a sus primeros compromisos internacionales con Ucrania a partir de 2011.
Pero esa nacionalidad ucraniana le traería ciertos problemas, ya que el jugador sería llamado a formar filas en el ejército para luchar en la guerra contra los rebeldes separatistas. Finalmente no sería para tanto y Edmar seguiría jugando al fútbol.
Durante el curso 2015\16 para uno de los clubes más destacados de la liga ucraniana, el Dnipro Dnipropetrovsk. Sin embargo no tendría mucho éxito con la escuadra azulona, y al año siguiente se marcharía a la MLS para jugar en el Boca Ratón, para después retornar al Ucrania y seguir jugando en el Metalist Járkov.
Partido ante Montenegro en el que Edmar debutó oficialmente con la selección ucraniana. |
- Sin opción alguna de representar a la selección brasileña, Edmar Halovskyi se sirvió de su nacionalidad ucraniana para convertirse en internacional y jugar para el combinado nacional de Ucrania, con el que hizo un gol en una quincena de apariciones.
El medio brasileño debutó con Ucrania el 10 de agosto de 2011, en una derrota frente a Suecia por 0-1. Su primera aparición oficial fue en un partido valedero para la clasificación del Mundial de Brasil 2014. Edmar participó en una amplia victoria por 4-0 ante Montenegro. A partir de 2014 dejaría de jugar para el seleccionado amarillo coincidiendo con el lío del conflicto armado ucraniano.
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