- Tan solo queda un superviviente del denominado "Milagro de Berna", y es el centrocampista Horst Eckel. El resto aquellos chicos que jugaron para Sepp Herberger en el Mundial de Suiza 54, saliendo campeones del torneo, son ahora parte de la historia del fútbol germano. Herbert Erhardt murió el 3 de julio de 2010 en su ciudad nata, a los 79 años.
Helmut Rahn, Josef Posipal, Toni Turek, Paul Mebus y el capitán Fritz Walter, fueron futbolistas de otra época que enaltecieron a su país en una dificultosa final frente a la Hungría de Ferenc Puskás, que por entonces contaban con un equipo prácticamente invencible. De forma milagrosa, los alemanes vencerían a los húngaros.
Pero "Ertl" no tuvo ni un minuto en aquella milagrosa hazaña, sin embargo fue un jugador importante en las próximas ediciones, Suecia 58 y Chile 62. Jugador de los SpVgg Fürth y Bayern, Erhardt llegó a capitanear a la selección.
Este polivalente futbolista nació en la ciudad de Fürth (Alemania), el 6 de julio de 1930. Creció en la pobreza en tiempos de la Segunda Guerra Mundial y ya en la posguerra, jugando al fútbol con pelotas de trapo improvisadas.
Su polivalencia no tenía fin. Era un futbolista que podía cubrir la línea de medios o actuar como defensa central. El seleccionador Herberger le utilizó a su antojo en sus apariciones internacionales, incluso en aquella final ante Hungría había planeado instalarle en el lateral izquierdo para frenar el poderoso ataque magiar.
Herbert era famoso por su tenacidad y constancia, aunque también por ser un jugador excesivamente duro, capaz de noquear al oponente sin miramientos. Fuerte y pundonoroso, en el vestuario era un tipo que se hacía notar.
La historia dice que Erhardt es uno de los mejores defensas en la historia del fútbol occidental. En su querida ciudad natal, empezó jugando al fútbol en equipos formados por la calle, hasta que entró a formar parte del SpVgg Fürth en 1948.
Dio sus primeros pasos por la liga germana jugando en el lateral, aunque ya en los inicios de la década de los cincuenta se convirtió en uno de los mejores centrocampistas del país, lo que le aseguraría una plaza en el equipo nacional que obraría aquella gesta en tierras suizas.
Sin opción de estrenarse en el Mundial, Herbert seguiría compitiendo para el conjunto de Fürth, para el que no ganaría títulos, aunque sí disputaría un buen número de partidos siendo parte muy importante del equipo.
Erhardt pasaría a ser muy importante a medida que finalizaba aquella década, finalizando su estancia en Sportpark Ronhof con unos registros de 335 partidos y 19 tantos, antes de afrontar su última Copa del Mundo.
A partir de 1962 jugaría para el Bayern de Munich, donde sería entrenado por Helmut Schneider y coincidiría con otras leyendas como Sepp Maier, Werner Olk, Rainer Ohlhauser y el delantero Rudolf Nafziger.
Aguantaría dos años más jugando al fútbol, haciendo gala de su amplio conocimiento táctico y esa veteranía que se había ganado como internacional. Para la escuadra bávara habría sumado 63 partidos, e incluso llegaría a hacer 5 goles. Tampoco pudo celebrar títulos durante su breve estancia por Munich.
Erhardt llegó a capitanear a la selección de Alemania en 16 ocasiones. |
- En 1964, cuando apenas había cumplido los 34 años, Herbert Erhardt se retiraría del deporte con casi cuatrocientos partidos en la liga alemana, a lo que habría que añadir sus actuaciones como jugador internacional.
Con el equipo nacional de Alemania llegó a intervenir en 50 partidos y anotó un gol. Herberger se lo llevó al Mundial de Suiza 54, donde pese a no jugar, pudo celebrar el título junto a sus compañeros de selección.
Sí tuvo mayor protagonismo en los Mundiales de Suecia 58 y Chile 62, en los que Erhardt ya ejercía como capitán del combinado germano. En 16 ocasiones fue el "jefe" del equipo sobre la cancha. Finalizado el Mundial en Chile, "Ertl" ya no volvería a jugar para su país.
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