- Habiendo superado los treinta años, Tomoaki Makino ( 章 野 ) afronta su primer Mundial a las órdenes del técnico Akira Nishino, quien sucedió en el banquillo a Vahid Halilhodzic a falta de dos meses para afrontar la competición.
Japón debutó en Rusia 2018 hace escasos días logrando una sufrida victoria ante Colombia por 2-1. Tomoaki no tuvo minutos en el encuentro, y eso que es un experimentado defensa que hubiera venido muy bien para amarrar el resultado. Pero bueno, aún queda torneo para que podamos observarle con lupa.
Es internacional desde 2010, habiendo participado en más de treinta partidos para colaborar en la conquista de dos Copas Kirin y la EAFF East Asian Cup 2013. Makino nació el 11 de mayo de 1987, en Nishi-ku, Hiroshima (Japón).
Conoció la Bundesliga con el F.C. Köln y el resto de su carrera deportiva va transcurriendo en la Japan League, donde hasta la fecha ha jugado para equipos como el Sanfrecce Hiroshima o Urawa Red Diamonds, su actual club.
Es un defensa muy polivalente, capaz de moverse por cualquier posición de la zaga, tanto en ambos laterales como por el eje central. Pero donde se siente como pez en el agua es jugando de cuatro, controlando siempre la medular evitando los ataques rivales. Es un central fino, elegante y muy contundente.
Su experiencia internacional se inicia en las categorías menores de la selección japonesa, destacando con el equipo Sub-20 y compitiendo en la Copa del Mundo juvenil en 2007. Por entonces, Makino ya pertenecía al Sanfrecce Hiroshima, en el que había pasado una etapa formativa de cinco años antes de estrenarse como profesional.
A partir de 2006 empezaría a jugar sus primeros compromisos serios con el equipo de Asaminami-ku, perteneciente a su ciudad natal. En su primer año con los mayores tendría tan sólo una oportunidad, aunque al año siguiente iría sumando más partidos en la máxima categoría nipona, en la que además haría su primer gol.
Fue llegando el curso 2008\09 cuando el zaguero empezó a asentarse en la titularidad, ayudando al equipo en su retorno a la primera división sumando 46 partidos en los que marcó 8 goles. Desde entonces nadie le arrebataría el puesto.
El equipo se asentaría en la J-League, con un Tomoaki que ya figuraba como uno de los mejores defensas del país. Gracias a ello debutaría con la selección nacional, y pronto sería captado por diversos clubes extranjeros.
Makino aterrizó en Alemania en el invierno de 2011, dispuesto a fichar por el F.C. Köln, para el que debutaría en la Bundesliga el 29 de enero en un partido liguero ante el St. Pauli, que acabó con derrota por 3-0.
En su primer año tendría cuatro apariciones más, pero siempre figuró como reserva a las órdenes de los diferentes entrenadores que se sentaron en el banquillo de Rhein. Al año siguiente fue peor, pues además de tener menor protagonismo, el Köln acabaría perdiendo la categoría al final del curso 2011\12.
En 2013 se fue cedido al Urawa, equipo que se haría con su propiedad al término de la temporada. Desde entonces sigue jugando para la escuadra de Saitama, con la que además ha ganado la Copa nipona y la Liga de Campeones de la AFC.
A los 31 años, Tomoaki Makino ha conseguido acudir a su primera Copa del Mundo. |
- Sus buenos resultados con el Urawa Red Diamonds le permitiría acudir a su primer Mundial, formando parte de la lista definitiva que compuso Akira Nishino. Pero su debut con la absoluta de Japón había llegado hace ocho años atrás, después de haber concursado con el equipo juvenil en la Copa del Mundo Sub-20 de Canadá.
Tomoaki Makino lleva 32 partidos y cuatro goles con la escuadra samurái. Conquistó dos Copas Kirin y un ejemplar de la EAFF East Asian Cup. Veremos si no tarda mucho en debutar en el Mundial de Rusia, en el que los japoneses ya han sumado su primera victoria.
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