- De los primeros campeones del mundo, este centrocampista fue un gran jugador y un personaje único, tanto dentro del campo como fuera. Está ubicado entre los mayores talentos del fútbol uruguayo, campeón del primer Mundial de la historia, en tres ediciones de la Copa América y de los Juegos Olímpicos de 1924 y 1928.
Jugó para varios clubes del fútbol argentino, como el Argentinos Juniors, Club Atlético Lanús y Atlanta de Buenos Aires. También sirvió en Peñarol, Club Nacional y Montevideo Wanderers. Nunca salió del continente americano.
Completó su carrera antes de que se iniciase la Segunda Guerra Mundial. Sus pasos los seguiría su sobrino Víctor Rodríguez Andrade, quien también llegaría a jugar para la selección nacional de Uruguay años después.
- José Leandro Andrade nació el 22 de noviembre de 1901 en Salto (Uruguay). Fue conocido por ser un gran futbolista, aunque también por bailar un tango con la mismísima Joséphine Baker, una popular vedette parisina de la época. También era famoso por sus fiestas nocturnas, pero eso no afectaba para su rendimiento en la cancha.
Era un centrocampista de gran poderío físico que acabó un poco mermado por contraer sífilis, razón por la que perdería mucho peso. Sin embargo, "La Maravilla Negra" siempre destacó por ser un pivote defensivo de magnífico toque, sacrificado en su juego y certero en los remates a puerta. Además era un portento físico.
Hijo de una madre argentina y un padre de raza negra, vástago de un inmigrante brasileño que fue esclavizado, se crió en el barrio de Palermo (Montevideo). Vivió junto a su tía, quien educó a este mago del balón que sentía pasión por el mundo carnavalesco. El fútbol era su mayor afición, a lo que se dedicaba cuando se lo permitían sus obligaciones. Mientras ya jugaba para el Misiones, Andrade se empleaba como repartidor de periódicos o limpiador de zapatos. Con eso se permitía un dinero que gastaría a su manera, mientras también colaboraba en los gastos de la casa. Con el equipo de su barrio dejó boquiabiertos a muchos, hasta que contó con la opción de adquirir su primer contrato en un club de fútbol, el que le ofreció el Club Atlético Bella Vista.
En los inicios de los años veinte, la también llamada "Perla" empezaría a darse a conocer, jugando como centrocampista ofensivo en un equipo en el que coincidió con José Nasazzi, su futuro compañero de selección.
Andrade no tardaría en cumplir con sus primeros compromisos internacionales, afamado por ser uno de los grandes descubrimientos en su país que empezaría a dar mucho en la competición uruguaya, en sus dos primeras campañas con Bella Vista, para el que jugaría hasta 1923.
Jugó más de setenta partidos y marcó siete tantos para el conjunto de los "Papales Auriblancos", donde fue la estrella antes de afrontar su primer reto olímpico en París 1294. Entonces ya era miembro del Club Atlético Nacional.
Y es que con el "Decano" ganaría sus primeros títulos a nivel de club. Alzaría los trofeos de cuatro torneos de liga y otros tres de la copa uruguaya, superando el centenar de partidos para después fichar por Peñarol.
Habiéndose coronado campeón del mundo en 1930, José Leandro Andrade se uniría a este otro club de Montevideo en el que no haría más que engrandecer su figura, aunque con el paso de los años se le vería algo bajo de forma.
En ese club en el que no había sido aceptado en su etapa juvenil, Andrade también celebraría otros galardones, siendo ganador de la liga uruguaya en otras dos ocasiones. Ya en 1935, el centrocampista aprovecharía para irse a una Argentina en la que había nacido su madre, donde se comprometería con el Atlanta.
Andrade en un partido frente al Celta de Vigo, en una gira previa a los JJ.OO. de París. |
- Ya eran los últimos pasos de un gran campeón. Quiso dejar rastro de su buen fútbol en la competición argentina, contando con breves estancias en el referido Atlanta y Lanús, de los que retornaría al fútbol uruguayo.
Tuvo mayor protagonismo con Montevideo Wanderers antes de regresar al país vecino, aunque no hizo gran cosa en su breve paso por Argentinos Juniors. Ya en 1936, Andrade dejaría el mundo del balón. Acabó viviendo en la más absoluta pobreza, en el sótano de un piso. Andrade fallecería el 5 de octubre de 1957, a los 55 años.
Como internacional fue todo un ganador, empezando por la Copa América de 1923, a la que seguirían las ediciones de 194 y 1926. Conquisto medalla de oro en los JJ.OO. de París 1924 y Amsterdam 1928, así como el Mundial de Uruguay de 1930. Andrade hizo para Uruguay un tanto en 34 partidos.
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