- No tuvimos opción a verle en un Mundial, aunque si le vimos hacer un buen papel con la selección australiana en la Copa Confederaciones de 1997, en la que su equipo fue subcampeón. En sus siete años de convocatorias internacionales, este defensor llegó a sumar un buen número de apariciones.
Tampoco es que haya jugado en los mejores clubes del mundo, pero Ivanovic formó parte de un Estrella Roja que en un futuro muy próximo iba a ganar la Champions. Terminaría su carrera en Australia, con el Virtus Soccer Club.
Milan Ivanovic (Милан Ивановић) es uno de los muchos futbolistas balcánicos que han defendido a los "Socceroos", aunque no nació en Australia. Vino al mundo en la ciudad de Sivac (Serbia), el 21 de diciembre de 1960.
Se crió en una Yugoslavia que aún respiraba paz, antes de que la situación se volviera insostenible a comienzos de los noventa. En 1978, Ivanovic ya jugaba para el F.K. Crvenka, donde tuvo una temporada de iniciación.
Tuvo la oportunidad de darse a conocer como los líberos de aquella época, un defensa central que sabía manejar el balón y que aportaba mucho trabajo para la medular, recuperando juego y distribuyendo balones a su antojo. Además, Milan era un tipo con muy buen físico: alto, fuerte y resistente.
Continuó dándose a conocer por la extinta competición yugoslava, en la que iba a crecer en su notable paso por el OFK de Belgrado. Llegaría a este club procedente del Rudar Kostolac, donde tuvo tres buenas campañas.
Ivanovic empezaría a sorprender en la máxima división, pasando en Karaburma tres años muy buenos, en los que realizó unos registros de 9 goles en 95 partidos. Aunque nunca sería convocado por el seleccionador yugoslavo, este defensor conseguiría llamar la atención de los mejores clubes del país, e incluso algunos extranjeros.
Finalmente, Ivanovic tendría la oportunidad de unirse al equipo más potente de la liga yugoslava: el Estrella Roja. Entonces lo entrenaba el croata Gojko Zec, quien le iba a ofrecer la oportunidad de debutar a mediados de los ochenta.
En aquel buen equipo coincidiría con auténticos talentos balcánicos, hombres como Robert Prosinecki, Dragan Stojkovic, Dejan Savicevic, Goran Juric y el macedonio Darko Pancev. En sus inicios por Belgrado, Milan tendría que aceptar irse cedido al Radnički Niš, donde estuvo año y medio.
A partir de 1988, el equipo cogería ciertos aires de grandeza, por lo que la participación de Ivanovic se iba a ver muy reducida. En sus años como miembro del "Crvena Zvezda" llegó a participar en 25 partidos, nada más.
Disfrutó de algunos éxitos antes de abandonar la entidad belgradense, la que en cosa de dos años se iba a proclamar campeona de Europa ante el estupor de todos. De aquel equipo saldrían muy buenos futbolistas y jugarían en importantes clubes europeos, pero ese no sería el caso del internacional australiano.
Ya se respiraba ambiente bélico por aquella Yugoslavia, por lo que muchos futbolistas balcánicos optarían por abandonar el país y así seguir jugando al fútbol. Como destino, Ivanovic elegiría el continente oceánico.
Ivanovic trata de frenar el avance de Ronaldo Nazário en un partido ante Brasil. |
- El zaguero serbio ficharía por el Adelaide City, para el que llegaría a disputar trescientos partidos en la liga australiana y con el que además ganaría bastantes títulos. En sus años por Adelaide, Milan jugaría cedido en otros clubes.
Pasaría por el White City Beograd, de Woodville. También jugaría para el Campbelltown City en sus once temporadas ligado al club de Adelaide, donde se retiraría en el año 2000. Años después, jugó de forma amateur para los Northern Demons.
Ivanovic se nacionalizó australiano y empezó a jugar para su selección a partir de 1991. Su trayectoria internacional se resume en 59 apariciones, sin poder llegar a competir en la Copa del Mundo. Sin embargo, con los "Socceroos" llegó a ser subcampeón de la Copa Confederaciones de 1997.
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