- Supongo que algunos de mi época recordarán a este centrocampista austriaco que tuvo participación en el lejano Mundial de Italia 90, miembro de una gran selección dirigida por Hickersberger, que causó una enorme decepción al no poder pasar de la fase de grupos. En aquella escuadra alpina se hallaban los Toni Polster, Peter Artner, Heimo Pfeifenberger, Gerhard Rodax y el meta Klaus Lindenberger... Y entre ellos estaba Zsak.
Manfred Zsak es más popular ahora por ser entrenador, aunque en su día fue un grandioso futbolista que desarrolló toda su carrera por Austria. Es una de las leyendas más recordadas del Austria Wien, que también tuvo tiempo a defender los colores de equipos como el Grazer, F.C. Linz o Admira Wacker, entre otros.
Este mediocampista de perfil defensivo cumplía con la antigua misión del líbero, algo que muchos entrenadores tratan de recuperar a día de hoy. Zsak era recuperador, distribuidor y un magnífico generador de buen fútbol.
Nació el 22 de diciembre de 1964 en la ciudad de Mödling (Austria). Con el Admira Wacker comenzaría a prepararse para una exitosa carrera internacional, debutando en 1982 y bajo las órdenes del técnico Felix Latzke.
Aunque al principio le costó ganarse un puesto como titular, Manfred empezaría a aparecer en bastantes citas del Admira, que entonces competía a muy buen nivel, tanto por la Bundesliga austriaca como en la Copa de la UEFA.
El joven centrocampista acabaría siendo imprescindible en el equipo de su ciudad, donde solo le faltaría ganar títulos. Aún así, Zsak disputaría 129 compromisos de liga durante aquel lustro con el equipo de Mödling, de donde ya saldría siendo un componente más de una selección nacional muy competitiva.
En 1987 ficharía por uno de los equipos de moda en la competición nacional, el Austria Wien. Empezaría jugando para Karl Stotz, aunque el equipo iba a coger mejor ritmo competitivo con la llegada de August Starek.
Zsak coincidiría con grandes internacionales para hacer una potente plantilla, con Franz Wohlfahrt en la portería, acompañado en defensa por Erich Obermayer y respaldando una poderosa zona de ataque formada por el gran Herbert Prohaska, el argentino Jose Alberto Percudani y Andreas Ogris.
Con semejante equipo, Manfred se acostumbraría a seguir luchando por conquistar Europa y también ganaría unos cuantos títulos, en lo que podríamos considerar como el momento auge de su carrera deportiva.
Aunque no caerían títulos europeos, Manfred Zsak consiguió dominar el título liguero por primera vez en su vida, e incluso en tres ocasiones consecutivas: 1991, 1992 y 1993. También alzaría tres trofeos de Copa.
El estelar centrocampista de Mödling seguiría en la entidad vienesa hasta 1996, completando casi una década de fiel compromiso en la que llegó a intervenir en nada menos que 250 partidos. Además, dejó 50 goles.
Saldría del club cuando ya ni siquiera acudía a las citas internacionales de su selección, aunque todavía se le veían fuerzas para seguir brillando en el césped. Zsak contó con alguna que otra oferta del extranjero, sin embargo, prefirió completar su trayectoria por Austria, siendo el Grazer AK su siguiente destino.
En 1990, Zsak jugaría los tres partidos de la fase de grupos del Mundial de Italia. |
- Aunque ya no habrían más gestas que celebrar, Zsak se acostumbró a seguir compitiendo en la primera división austriaca, pues pronto dejaría la zona de Estiria para jugar en el F.C. Linz, donde solo estuvo una temporada.
Y como no, Manfred volvería a jugar para el Admira Wacker durante el curso 97\98. Ya se notaba que le pesaban las piernas, por lo que terminaría su carrera tras representar a otros como el Schwechat, Bad Vöslau y el Rust.
Zsak empezaría a jugar para la selección de Austria a partir de 1986, cuando todavía servía al equipo de su ciudad. En una trayectoria internacional que duró cerca de siete años, este centrocampista hizo unos registros de 5 goles en 49 encuentros. Participó en el Mundial de Italia 90, en el que tuvo 3 apariciones, 2 de ellas como titular.
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