¿Te acuerdas de Ricardo Carvalho?

- Histórico campeón de la Champions League con el Oporto de José Mourinho, nunca alcanzó semejante gloria pese a jugar para clubes de gran fama como el Chelsea, Real Madrid o Mónaco. En China concluiría una carrera deportiva que adornó con su último éxito internacional con Portugal.

Y es que a nivel de selecciones también disfrutó de lo lindo, lástima que Grecia le arrebató la gloria en aquella Eurocopa de 2004. Sin embargo, nada ni nadie podría evitar que cantase el alirón en la de Francia 2016.

Tres torneos europeos y dos Mundiales tuvo tiempo a disputar este ya legendario defensor. En el combinado portugués formó un inolvidable equipo con los Cristiano Ronaldo, Rui Costa, Deco, Costinha o Luis Figo. 

- Era un defensa central con mucha calidad. Siempre tenía recursos para sacar el balón bien defendido, actuando con decisión y firmeza en cada jugada para dar seguridad al equipo. Sin ser excesivamente alto -que es el prototipo de hoy día- Ricardo Alberto Silveira de Carvalho era un defensa que podía recordarnos a otros inolvidables cracks como Paolo Maldini o Fabio Cannavaro. 

Nació en la localidad de Amarante (Portugal) el 18 de mayo de 1978. Era un jugador de mi época, de hecho, tan solo me saca unos días de edad. Quizá por ello puedo comprender tan bien sus años como futbolista, de los que vivieron ese cambio entre el fútbol de antaño y el moderno. 

A finales de los ochenta ya jugaba para el Amarante F.C., ese modesto equipo que le vio crecer y abandonó para ingresar en el Oporto a mediados de los noventa. Aún sin saberlo, aquella entidad sería la que le cambiaría la vida, en la que viviría sus mejores años como deportista tras finalizar sus años de formación.

Pero antes de poder debutar con el plantel profesional del Oporto, Carvalho tendría que ir cogiendo ritmo en clubes más humildes como el Leça, Vitória Setúbal o F.C. Alverca. Con el último debutaría en la Primeira Liga.

Antes de que Mourinho se sentase en el banquillo do Dragão, Ricardo ya debutaría para el Oporto. Ocurriría en Funchal, el 27 de agosto de 2001, en un encuentro contra el Marítimo en el que el joven zaguero partiría como titular. El equipo conseguiría una importante victoria por 1-3.

Pero las cosas empezarían a ponerse feas y eso provocaría el despido de Octávio Machado, coupando su lugar un joven Mourinho que seguiría confiando en Carvalho para hacer historia por todo el viejo continente. 

Carvalho empezaría a disfrutar del fútbol a tope, conquistando dos títulos de Liga, la Copa de la UEFA de 2003 y la increíble Champions de 2004. Lástima que aquel año no lo redondeó con la Eurocopa que se celebró en Portugal.

Aquel Porto se desintegró totalmente. Además de la marcha del entrenador, Carvalho también aceptaría abandonar el país para buscar mejores metas en el Chelsea de Román Abramóvich. A Londres se lo llevaría su entrenador, con el que esperaba seguir alzando títulos en la exigente Premier League.

Hasta tres títulos ligueros llegaría a levantar el zaguero luso, aunque uno de ellos ya sería con Carlo Ancelotti en el banquillo de Stamford Bridge, campo en el que Ricardo jugó durante casi siete temporadas.

El de Amarante se marcharía a España para buscar nuevos retos, y especialmente porque allí volvería a ser entrenado por su querido maestro, un Mourinho que también contaría con Pepe y Cristiano Ronaldo, además de otros grandes jugadores como Karim Benzema, Xabi Alonso, Mesut Özil o Sergio Ramos.

Ricardo Carvalho jugó para Portugal 89 partidos internacionales.

- Aquel Real Madrid ganaría Liga, Copa y Supercopa española, pero no sería posible alzar la "Orejona", o al menos, no en los años que estuvo Carvalho compitiendo por la Liga Española. En 2013 se iría a Francia para fichar por el Mónaco.

Para el equipo del Principado jugaría tres temporadas, cumpliendo con un buen número de partidos hasta que prefirió vivir el final de su carrera en China con el Shanghái SIPG. En 2017 colgaría las botas con 38 años de edad.

Para la selección portuguesa jugó un total de 89 partidos y anotó 5 goles. Debutaría para la misma en 2003, a tiempo para disputar una Eurocopa que a Portugal se le escapó en su propio feudo frente a Grecia. Tras dos Mundiales y otra Euro más, Carvalho celebraría con su selección la conquista de Francia 2016.