- Lo que empezó siendo una carrera prometedora acabó en uno de los mayores fiascos del fútbol oriental, y eso que Lee siempre fue un jugador que me gustó. Tal Vez no contó con esa gotita de suerte que da la confianza suficiente para hacer esas genialidades que demostró con la selección de Corea del Sur, con la que compitió en dos Copas del Mundo.
Lee Chun-Soo o Chun-Soo Lee (이천수) ha llegado a jugar para diversos clubes de distintos países: España, Holanda, Japón, Arabia Saudí... Ha vagado por diferentes ligas sin conseguir triunfar en las más grandes, pero no debemos considerarlo como un fracaso.
En la Liga Española no pudo destacar. Fue un fichaje sorpresa de la Real Sociedad, que tras no adaptarse a la competición, acabaría jugando para un Numancia de Primera que perdería la categoría sin poder presumir del talento del coreano, que seguiría intentando sobresalir en la Eredivisie.
- Al igual que él, otros jugadores orientales no llegaron a triunfar en España, así que no es único su caso. Jugadores como Kiyotake, Chu-Young Park, Shoji Jo o Nakamura tampoco lograron destacar en la afamada "Liga de las Estrellas".
Este habilidoso extremo nació el 9 de julio de 1981 en Incheon, Corea del Sur. Alcanzó una gran fama durante la Copa del Mundo 2002, en la que su selección -anfitriona junto a Japón, alcanzaría el puesto histórico de semifinales. Se le recuerda como un ágil jugador de ataque que, pese a ser diestro, rendía muy bien por las dos bandas, destacaba como mediapunta y se defendía como delantero centro. De ahí que durante sus dos etapas como jugador del Ulsan Hyundai superase la cifra de treinta goles.
A mi donde más me gustaba era por la banda, donde empleaba toda su explosividad para zafarse de sus rivales y encarar la portería contraria. Tenía un disparo colocado y duro, algo que solía lucir en sus lanzamientos de libre directo. Por lo demás, Lee era un jugador veloz, técnico y muy dinámico, pero su suerte le abandonó en las competiciones más altas de Europa. Siempre fue considerado como el futuro del fútbol coreano, y si no que se lo pregunten a sus técnicos de Bupyeong High School, donde se inició como futbolista.
Ingresó en las filas del Ulsan Hyundai para debutar en la K-Leaque durante el curso 2001\02. Haría siete goles antes de que el seleccionador le citase para afrontar la Copa del Mundo, donde jugó todos los partidos como una de las bazas de ataque de la selección surcoreana.
En su temporada y media con el Ulsan dejaría quince goles, pero fue su actuación en el Mundial la que le llevaría a San Sebastián en el verano de 2003, ya que los directivos del equipo vasco ya le habían seguido desde su rendimiento en torneo internacional.
Debutó en la máxima competición española el 30 de agosto de aquel mismo año, jugando casi todo el partido en la visita de la Real al campo del Espanyol. Los donostiarras sacaron un punto de su visita y Chun-Soo dejaría buenas sensaciones, pero nada más.
Denoueix le seguiría dando minutos en partidos de Liga, Copa y Champions League, pero acabaría acostumbrándose a estar en el banquillo, hasta ser incluso desplazado a la grada, pues el técnico galo no contaba con él.
Sin poder demostrar mucho en el club de Anoeta, cumpliría otro año en la Liga Española, aunque jugando para el Numancia. A sus trece partidos disputados con la Real, hubo que sumarle otros quince con el equipo soriano y, aún así, el atacante coreano se marcharía de España sin poder hacer gol en Liga.
Por si fuera poco, con el Numancia conoció el amargo sabor del descenso tras la conclusión del curso 2004\05, y de regreso a Donosti, Lee se desvincularía del club txuriurdin para retornar a su país y volver a fichar por el Ulsan.
Volvería a destacar en la liga surcoreana haciendo diecisiete tantos en 48 partidos, lo que valió para buscar una nueva oportunidad en el fútbol europeo tras su fichaje por el Feyenoord, donde otra vez se daría un batacazo compitiendo en la Eredivisie.
Tras su nuevo fracaso en Holanda, y dos cesiones en equipos de su país como el Suwon Bluewings y Jeonnam Dragons, Lee se iría a Arabia Saudí en 2009, donde jugaría durante una campaña para el Al-Nassr antes de marcharse a Japón.
Jugó una temporada en la liga japonesa con el Omiya Ardija y el 31 de marzo de 2013 retornó a su país para jugar año y medio en el Incheon United. Con este conjunto despediría su carrera el 5 de noviembre de 2015.
Durante su etapa internacional de ocho años, Lee participó en los Mundiales de Corea-Japón y Alemania. |
- Lee Chun Soo empezaría su carrera internacional a finales de los noventa, jugando en el equipo Sub-20 de Corea del Sur. Llegaría a jugar sus primeros partidos con el equipo absoluto a partir del nuevo milenio, justo a tiempo para afrontar su primer Mundial en 2002.
Fue protagonista de aquella sorprendente selección que alcanzó las semifinales en Corea-Japón y volvería a jugar la Copa del Mundo cuatro años después, en Alemania, torneo en el que hizo su primer gol internacional en el partido ante Togo, aunque el equipo no pasaría de la primera fase. En total ha jugado para el combinado surcoreano 78 partidos y marcó diez goles.
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