De cerca: Emil Hallfredsson.

- Se le ha visto jugar en Italia e Inglaterra, formando parte de clubes como el Udinese, Reggina, Tottenham o Barnsley, pero también pasó por clubes islandeses, noruegos y suecos. Así transcurre la carrera deportiva de un jugador que desde joven ya apuntaba muy alto.
En lo que a su internacionalidad se refiere, Emil Hallfredsson es uno de los futbolistas que más veces se han calzado la elástica de la selección de Islandia, con sesenta participaciones. Además formó parte de la escuadra islandesa que en la última Eurocopa de Francia 2016 fue el equipo revelación que alcanzó los cuartos de final.

Ya se halla en la recta final de su carrera, pues Emil tiene 33 años. Nació el 29 de junio de 1984 en Hafnarfjörður (Islandia) y allí se crió hasta descubrirse como futbolista en las filas menores del Fimleikafélag Hafnarfjarðar, con el que más tarde daría el salto profesional.

Hallfredsson es un centrocampista de tareas de contención que también puede jugar algo más adelantado. Desde joven destacó jugando como interior zurdo, pero poco a poco fue acoplándose a las labores de medio centro, posición en la que logró lucir sus mejores cualidades como centrocampista.
Es un hombre sólido, duro y con mucho oficio. Por su forma de jugar y su aspecto físico podría recordarnos a Thomas Gravesen, pero en versión islandesa. En Italia demostró que tiene gol y es un jugador bastante cumplidor, además de ser un auténtico pulmón.

Con el Fimleikafélag Hafnarfjarðar se dio a conocer en la Úrvalsdeild (liga islandesa), jugando durante dos temporadas un total de 29 partidos en los que metió siete goles. Su momento llegó a lo largo del curso, cuando varios clubes extranjeros empezarían a mostrar interés por el joven talento nórdico.

El entonces Director Deportivo Frank Arnesen decidió llevarse al jugador a Inglaterra para realizar unas pruebas con el Tottenham Hotspur en diciembre de 2004. Desde el club de Wembley habían estado buscando jugadores que pudieran resolver sus problemas en la banda izquierda, y Hallfredsson fue una de las alternativas.
Pero la experiencia del mediocampista como miembro de los "Spurs" no pasaría de jugar con el filial o los reservas, por lo que su estancia en Inglaterra no pasaría de los dos años, llegando a ser cedido al Malmö, con el que conoció la Allsvenskan sueca.

Tras su exitoso paso por el fútbol sueco se marcharía al país vecino de Noruega, donde no tendría muchas opciones con el  Lyn Oslo, por lo que decidiría lanzarse en una nueva aventura por el fútbol italiano.

Emil ingresó en las filas del Reggina, con el que debutó en la Serie A el 26 de agosto de 2007, en un empate a uno contra el Atalanta. Durante cuatro años jugó para este club italiano, siendo también cedido a equipos como el Barnsley inglés o el Verona en su regreso al país de la bota.
Parece que el islandés había encontrado su sitio en el Hellas Verona, así que acabó desvinculándose del Reggina para establecerse en el conjunto de Bentegodi, con el que participaría en un total de 178 partidos en los que hizo 16 goles.

En 2016 se marchó del Verona para fichar por el Udinese. Hallfredsson sigue jugando en la Serie A, en un equipo en el que también tiene continuidad y con el que posiblemente concluya su experiencia por tierras italianas.

Hallfredsson acudió a la Euro de Francia 2016, en la que Islandia alcanzó los cuartos de final. 

- Emil Hallfredsson pasará a la historia junto a otros destacados futbolistas de la selección islandesa que en la última Eurocopa de Francia 2016 sorprendieron a muchos teniendo el papel de equipo revelación del torneo internacional. El sueño islandés terminó en los cuartos de final ante la selección anfitriona, siendo Hallfredsson uno de los jugadores más activos del combinado nórdico.

Es posible que el mediocampista de Hafnarfjörður insista en seguir jugando para colarse entres los primeros jugadores con más participaciones internacionales. De momento ya acumula sesenta internacionalidades, a veinte partidos del tercero, Guðni Bergsson. En sus apariciones logró hacer un gol ante toda una campeona del Mundo como España, partido que acabó con empate a uno.