¿Te acuerdas de Brian Clough?

- Siempre será uno de mis entrenadores favoritos (y supongo que para muchos), aunque también desarrolló una carrera como futbolista pese a que ésta fuera más corta debido a las lesiones que forzaron su retirada.
Todos recordarán sus servicios como entrenador junto a su amigo y compañero Peter Taylor. Ambos hicieron grandes a equipos como el Derby County o Nottingham Forest. Debido a su rivalidad con Don Revie, también acabaría dirigiendo al Leeds United, empresa en la que fracasó.

Como jugador llegó a ser internacional con Inglaterra y defendió los intereses de clubes como Middlesbrough y Sunderland. Hoy en Fútbol Británico rendimos homenaje a un grande entre los grandes, o quizá el más grande. Esta es la noche de Brian Howard Clough.

Brian Clough en su etapa como entrenador.

- Lo suyo era el fútbol y por ello necesitó dedicar toda su vida al deporte al que su propio país dio vida. Nació el 21 de marzo de 1935 en esa misma ciudad de Middlesbrough que ahora y por siempre contemplará esa estatua que homenajea su figura.
Su padre trabajaba en una fábrica de dulces y la familia residía en Grove Hill. También Brian acabaría trabajando como mensajero mientras jugaba al fútbol para pasar el rato, algo que se le daba muy bien. Con el Great Broughton Juniors daría sus primeros pasos en el balompié amateur, de donde pasaría al Billingham Synthonia y más tarde al Middlesbrough F.C., equipo al que siempre idolatró al igual que su padre. En la academia formativa de este club nacería una figura del fútbol inglés.
Como entrenador sabemos lo que fue, pero como futbolista se decía de él que tenía una técnica asombrosa, un gran don para hacer goles y una inteligencia que le permitía dominar el juego. De clara ideología socialista, Clough tenía un fuerte carácter que a veces le jugaba malas pasadas, además de una tremenda sinceridad que le permitía soltar declaraciones un tanto polémicas. Quizás eso es lo que le hizo grande, tanto de jugador como de entrenador.

Continuó iniciándose como futbolista en la cantera del "Boro" hasta que el Servicio Militar le obligó a cumplir con sus obligaciones para el estado británico. Una vez finalizado su cumplimiento, Clough volvería al Middlesbrough para debutar en la segunda división inglesa.

Su vida cambiaría de repente. Aquel osado delantero, sexto de nueve hermanos, pronto destacaría en una categoría que le quedaba muy pequeña, pero nunca pudo ascender con la escuadra de Riverside. No tardarían en aparecer, ofertas para abandonar el equipo de su ciudad, pues incluso había debutado ya con la selección nacional.
Siempre un tipo disconforme, el delantero se quejaba siempre de los goles que encajaba su equipo, y eso que su amigo Taylor era portero de la plantilla. Ahí nacería una gran amistad entre los futuros entrenadores.

Con una experiencia de 222 partidos en los que marcaría la sorprendente cifra de 204 dianas, el de Grove Hill acabaría aceptando la propuesta de fichar por el Sunderland, otro club que, para bien o para mal, marcaría su carrera.

Las 42.000 libras que fueron abonadas a la entidad de Middlesbrough, harían que Clough se trasladase a Tyne y Wear en 1961, después de seis temporadas en las que ya había mostrado un gran talento.
Sin embargo no fue un talento duradero. Su carrera como futbolista sufriría un cambio inesperado al caer lesionado en un partido ante el Bury, celebrado el 26 de diciembre de 1962 en Roker Park.

Como consecuencia de un choque contra el guardameta Chris Harker, Clough se lesionaría gravemente del ligamento cruzado anterior de su rodilla, lo que le obligaría a perderse el final de la temporada y la siguiente entera.

Brian Clough tuvo una corta trayectoria como jugador debido a una lesión de ligamentos cruzados. 

- El Sunderland acabaría ascendiendo a primera división, pero Clough ya no volvería a ser el mismo. En la campaña 1964\65,  "Old Big 'Ead" tendría tiempo a fabricar su último gol antes de decidir el fin de su carrera. Fue la de entrenador, claro, pues ya sabemos que posteriormente fue uno de los mejores entrenadores que se han podido ver por Inglaterra.
Llegó a jugar para la selección inglesa en sus categorías menores, así como para el equipo absoluto, con el que tuvo un par de apariciones ante las selecciones de Gales y Suecia. No obstante, nunca pudo hacer gol como jugador internacional.

Brian Howard Clough fue un sensacional entrenador al que a veces le traicionaba su excesiva ambición. El alcohol acabaría con su vida, ya que un cáncer de hígado sería el culpable de que un triste 20 de septiembre de 2004 nos dejara para siempre.