- Muchos desconocíamos la historia de este futbolista, considerado por muchos como el mejor jugador turco de todos los tiempos. No tuvo la necesidad de jugar en un gigante europeo para ganarse el reconocimiento de todos, siendo leyenda de un Fenerbahçe con el que hizo infinitos goles.
También hizo muchos goles con la selección de Turquía, con la que fue el máximo artillero hasta que Hakan Sükür batió su récord. Acudió a la Copa del Mundo de Suiza 1954, en la que dejó dos objetivos y muy buenas acciones.
Su larguísimo nombre no es fácil de recordar. Lefter Küçükandonyadis era hijo de griegos, aunque nació el 22 de diciembre de 1925 en Büyükada (Turquía). En esa isla del mar de Mármara se inicia su historia como futbolista. Todos le llamaban "Küçük", que quiere decir algo así como "Pequeño", ya que era un atacante menudo.
Hijo de un pescador y una sastre, Lefter se tuvo que criar en un ambiente de humildad en aquella localidad de Estambul, donde se inició como futbolista en las filas del Taksim SK donde estuvo entre finales de los años treinta y comienzos de los cuarenta.
Era principalmente un jugador de banda, ya que solía actuar por el carril izquierdo como extremo o de interior. También podía actuar como volante ofensivo, pero brillaba más cuanto más cerca del arco rival, sobre todo por su especial olfato goleador, desborde y habilidad de pasar el balón.
Después de dos buenos años de iniciación profesional con el Taksim -para el que hizo 9 goles- se incorporó al Fenerbahçe en 1947, ese club con el que conseguiría los mayores logros a lo largo de su carrera.
Küçükandonyadis no tardaría en convertirse en uno de los mejores atacantes nacionales, llegando a liderar la tabla de goleadores de la liga nacional en dos ocasiones y ganándose el derecho de liderar la zona de vanguardia de la selección turca, con la que pronto acudiría al Mundial de Suiza.
Tres títulos de liga alzaría con el equipo de Kadıköy, así como una edición de la Copa Atatürk y otros éxitos antes de que optase por probar suerte lejos de su país natal, el que abandonaría en el verano de 1951.
Se marcharía a la Fiorentina para probar fortuna en el fútbol italiano, donde no estaría más de un año. Eso sí, Küçükandonyadis dejaría constancia de su olfato goleador, haciendo 4 tantos en 29 partidos con el conjunto viola.
Acabada su breve experiencia por Italia, Lefter también viajaría a Francia, donde representaría al OGC Nice durante la campaña 1952\53, teniendo escasas oportunidades para demostrar ese talento que había dejado en sus años con el Fenerbahçe, equipo al que retornaría tras dos años fuera de Estambul.
Durante más de una década volvería a defender con pundonor los intereses de un club en el que pasó gran parte de su carrera para dejar unos números históricos, con 178 dianas en los 300 partidos que disputó con los "Sarı Kanarya".
No es de extrañar que su impronunciable nombre figure en el himno del Fenerbahçe, pues nunca hubo jugador que honrase más al club como lo hizo él, ganador de muchos títulos colectivos y gran goleador y capitán de ese equipo con el que saboreó los mejores momentos de su carrera deportiva.
Küçükandonyadis es uno de los mejores goleadores en la historia del fútbol turco. |
- Volvería a jugar fuera de Turquía, aunque por sus raíces helenas, Küçükandonyadis estuvo como en casa con el AEK Atenas, aunque no se extendiese por mucho tiempo su estancia en la capital griega, donde dejó dos goles.
Los últimos partidos de su extensa trayectoria deportiva los viviría con el Boluspor. Con este equipo colgaría las botas en 1968, para después iniciarse como entrenador, haciéndose cargo de varios clubes hasta 1972.
Fue un jugador importante para la selección turca, a la que capitaneó defendió durante dos décadas y para la que completó 46 partidos e hizo 21 goles. La única gran participación internacional la tuvo en el Mundial de Suiza de 1954, en el que Küçükandonyadis marcó 2 tantos.
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