¿Te acuerdas de Duncan Edwards?

- Anteayer repasábamos aquel lamentable "desastre aéreo de Munich" en el que varios futbolistas del Manchester United fallecieron a consecuencia de la colisión terrestre del avión en el que viajaban. Duncan Edwards fallecería quince días después, en el hospital Isar der Rechts de Múnich, el 21 de febrero de 1958.

Justo estaba en el mejor momento de su carrera, internacional por Inglaterra desde las categorías menores y ya contrastado del equipo absoluto. Gozaba de una gran fama hasta que aquel accidente apagó su vida y el de otras personas.
Tenía solamente veintiún años y ya era uno de los mejores futbolistas del país, bicampeón de liga con el Manchester United, en un equipo joven al que apodaban cariñosamente los "Busby Babes". Duncan estaba en la flor de la vida y planeaba casarse con su novia.

- Nació el 1 de octubre de 1936 en Woodside, Dudley (Inglaterra). Sus padres no tuvieron suerte, ya que anteriormente a la pérdida de Duncan, ya habían lamentado la muerte de su hermana pequeña, que murió con poco más de un año de vida. La familia se había mudado al 31 de Elm Road, en Priory Estate. El pequeño y sonriente Duncan estudiaría siete años en la escuela primaria Priory, para iniciar sus estudios secundarios en Wolverhampton Street.
Empezó a dar sus primeras patadas al balón en las escuelas por las que pasó, teniendo continuidad en Worcestershire y Birmingham, en cuyos equipos de barrio destacó como cualquier otro muchacho británico. Allí se puliría aquella tempranera joya, un interior izquierdo con un golpeo de balón exquisito y una técnica fuera de lo común.
Ya desde joven capitanearía al equipo escolar English XI, siendo descubierto en el viejo estadio de Wembley por Jack O'Brien, quien informaría a Matt Busby de lo que había visto sobre el terreno de juego. Los informes impresionarían tanto al célebre manager, que convencido por el entrenador de Edwards no dudaría en firmar al joven talento de doce años.

Edwards ya había sido tanteado por Aston Villa y Wolverhampton Wanderers, pero el Manchester United se adelantaría para ofrecerle un contrato amateur el 2 de junio de 1952. A partir de entonces recibiría formación en la academia roja.

A aquel buen chico se le vieron condiciones que apenas se apreciaban en otros futbolistas, y pronto seguiría subiendo su popularidad como la espuma, llegando a debutar con el equipo de mayores de Inglaterra con tan solo diecisiete años.
Entonces compaginaba apariciones entre el equipo juvenil y el absoluto, habiendo conquistado la FA Cup con los primeros y asomando la cabeza en el fútbol profesional, debutando en la liga inglesa el 4 de abril de 1953, en un encuentro contra el Cardiff City en el que los "Diablos Rojos" salieron derrotados por 4-1.

Pero pronto se empezó a ver el United más brillante, un equipo que rebosaba juventud dirigido por Matt Busby. Los Tommy Taylor, Coleman, David Pegg y Viollet ya empezaban a causar sensación, especialmente cuando conquistaron el primer campeonato de liga en 1956.

Al año siguiente se repetiría el título de liga, al que acompañarían otros dos de la Charity Shield. Los "Busby Babes" ya eran una realidad, y a estos se uniría el debutante Bobby Charlton, gran amigo y pareja letal con Duncan.
Iniciaron el curso 1957\58 con gran ilusión, vitoreados por los logros alcanzados hasta entonces dirigidos por la dupla técnica formada entre Mr Busby y Jimmy Murphy. Ambos harían grandes a los muchachos del United.

El equipo afrontaba la Copa de Europa mientras lideraban la Liga, pero aquel sueño europeo acabaría en pesadilla. Habiendo encarrilado la eliminatoria ante el Estrella Roja por 2-1 en Old Trafford, los jugadores lograrían su última hazaña en Belgrado al empatar a tres en tierras yugoslavas.

Duncan Edwards hizo 20 tantos en 151 partidos disputados con el Manchester United.

- El Milan esperaba en la siguiente ronda, pero muchos jugadores de aquel fantástico equipo no volverían a jugar al fútbol. El 6 de febrero de 1958, el avión en el que viajaba la expedición del Manchester haría su última escala en Munich, ciudad alemana de la que no saldrían.
A causa de la helada y los fallos del motor, la aeronave acabaría estampándose en un terreno nevado en el que muchos compañeros de Edwards perderían la vida. Duncan lo haría días después, en aquel hospital de Munich en el que llevaba días ingresado.

Menudo futbolista se perdería el mundo del balompié, que con tan solo veintiún años había disputado 151 partidos en los que dejó 20 goles para el Manchester Utd. Para la selección de Inglaterra haría 5 goles en 18 partidos, pero por pocos meses se perdería aquel Mundial de Suecia que ya aguardaba acoger su talento.