¿Te acuerdas de Santi Cañizares?

- José Santiago Cañizares Ruiz fue uno de los mejores porteros españoles de su época. Se inició en el Calvo Sotelo y pasó a formar parte de la cantera del Madrid, club al que volvería tras brillar como portero del R.C. Celta. Ganó varios títulos en su vuelta a la capital, y lo mismo hizo en el Valencia, donde fue idolatrado. 

Nacido en Madrid (España) el 18 de diciembre de 1969, también tuvo sus inicios con el Severo Ochoa de Puertollano. Allí comenzaría la carrera de uno de los grandes arqueros de los noventa que incluso sería internacional con España en 46 ocasiones.

Al principio jugaba en todas las posiciones, aunque su sitio estaría en la portería, donde brillaba con sus felinas estiradas y unos reflejos increíbles. Tras formarse en la cantera del Real Madrid, pasaría a jugar para el Elche.

- Sus actuaciones en Elche y Mérida le catapultaron a la Primera División, donde le esperaba el Real Club Celta para debutar un 6 de septiembre de 1992. El meta madrileño completó dos magníficas temporadas en el conjunto céltico, siendo la primera de ellas la mejor al alcanzar el trofeo Zamora, compartido con el portero del Deportivo de La Coruña Liaño.

En la temporada 93\94, Santi vivió junto a sus compañeros una cita histórica y emocionante a la par que triste. El Celta había llegado a la final de la Copa del Rey que se celebraba en el Vicente Calderón y su rival era el Real Zaragoza. Miles de aficionados viajaron con la ilusión de no regresar a Vigo con las manos vacías, pero la historia les negó ese privilegio, en un partido disputadísimo y complicado que llevaría a ambos equipos a jugar la prórroga y, posteriormente, la tanda de penaltis.
Tras lanzarse todos los penales, el Zaragoza se proclamaba campeón y los jugadores celtiñas acabaron destrozados sobre el césped del Calderón sollozando desconsolados. La cara de Cañizares era el fiel reflejo del dolor.
Después de cumplir una corta pero impecable carrera con el Celta de Vigo, Cañizares logró llamar la atención a uno de los grandes de la liga española, el Real Madrid, equipo que ya había tenido anteriormente al guardameta formándose en las categorías inferiores.

Las cosas no le fueron bien en el equipo capitalino. Primero Paco Buyo ,y después el alemán Bodo Illgner, impidieron que el madrileño fuera el que ocupara el puesto de titular para defender el arco merengue.
Con el cuadro merengue ganó dos ligas y una Champions League, pero al no gozar de oportunidades, decidió probar fortuna en Valencia, donde le esperarían los mejores años de su carrera. De Chamartín se marcharía con 41 apariciones. 

Su llegada al Valencia coincidió con la mejor época del conjunto ché desde los lejanos años cuarenta, pues conseguiría dos campeonatos de liga cuajando unas espectaculares actuaciones bajo palos que le convertirían en uno de los mejores porteros, tanto a nivel nacional como internacional.

A las dos ligas ganadas con los valencianos hay que añadirle una Copa del Rey, una Copa de la UEFA, una Supercopa de Europa y otra de España, lo que supuso un amplio currículum con muchos títulos para el madrileño.

También disputó dos finales de la Champions League con el Valencia, (2000 y 2001), siendo un fijo en el once del conjunto ché y uno de los hombres más importantes. A nivel personal, logró alzarse en tres ocasiones con el premio Zamora, aparte del que consiguió jugando con el Real Club Celta de Vigo.

Cañizares participó con la selección española en el Mundial de USA 94.

- Tras rechazar varias ofertas de la Premier League y de la Major League, aquel espectacular arquero de peinados atrevidos y retador de la superstición, decidiría colgar los guantes pasando a ser comentarista deportivo.

En el capítulo internacional, Cañizares acudió al mundial de USA94 con la selección española, con la que fue 46 veces internacional. Debutó en un partido frente a Dinamarca en Noviembre de 1993, cuando el madrileño jugaba en el Celta. Entró al terreno de juego en lugar de Andoni Zubizarreta.

Una vez más, un portero del Real Madrid, Iker Casillas, le mandó a la suplencia cuando Santi parecía ser el portero fijo de la selección española. A pesar de ello, disputó muchos partidos con la el equipo nacional.