- Quiero darme otro paseo por mi infancia para recordar aquellos Mundiales que a tanta gente reunía ante el televisor. Algunos éramos más entusiastas. Yo recuerdo que estudiaba a todos los equipos participantes, sus plantillas y compraba revistas para informarme mejor. Para mi el fútbol siempre movió montañas.
Recuerdo de forma muy especial el Mundial de Italia 90 y a esa Bélgica con algunos de sus jugadores: Enzo Scifo, Michel Preud'homme, Marc Wilmots... Y aún recitaría a otros miembros como Versabel. Albert, Degryse, Grun, Gerets, Ceulemans,...
Entre aquellos nombres figuraba el de Marc Jozef Emmers, un jugador de pelo claro que a lo largo de su carrera jugó para clubes como el Anderlecht, Lugano o Perugia, entre otros. Se retiró a comienzos del nuevo milenio.
A este polivalente defensor le perdí la pista del todo, ya que no ha ejercido como entrenador ni se le ha visto en los medios por ninguna clase de acontecimiento. Tal vez se halle en su casa recordando que un día fue jugador de la selección belga y que con ella compitió en dos Copas del Mundo, o a lo mejor esté leyendo este artículo, ¿Quién sabe?.
No es el típico futbolista que debamos recordar por ganar un Balón de Oro o cualquier tipo de torneo internacional, tampoco se le recuerda por alzar el trofeo de la Liga de Campeones. Al menos con el Anderlecht sí pudo sentirse un ganador.
Emmers nació el 25 de febrero de 1966 en Hamont-Achel (Bélgica). Su trayectoria deportiva se inicia en la ciudad de Genk, donde tomaría formación en las filas del Thor Waterschei, el equipo que marcó la eclosión de este jugador.
No era un crack destacado, pero por lo que yo pude ver de él, sí era un tipo que sabía tratar el balón, un jugador de banda derecha que solía desempeñarse como lateral en defensa, llegando a veces a formar como interior, extremo o medio de contención. Incluso en ocasiones ha sido alineado como defensa central.
El Thor Waterschei fue el que le convirtió en profesional y le dio la oportunidad de conocer la división de oro belga. Con este equipo debutaría en 1983 y participaría en 98 encuentros llegando a marcar 14 tantos.
Su carrera cambiaría a mejor tras unirse al KV Mechelen, pues gracias a sus actuaciones en este equipo lograría participar en sus primeros partidos internacionales con Bélgica, y ya en 1990, acudiría al Mundial de Italia.
Es posible que tras el Mundial contase con varias ofertas de equipos extranjeros, pero Emmers seguiría jugando para el cuadro de Mechelen, el que abandonaría en 1992 para fichar por el RSC Anderlecht, un destacado de la Jupiler League.
Con el club de Bruselas tendría 60 apariciones y haría tres goles, llegando a conquistar el título liguero en dos ocasiones para poder competir en el torneo más importante de Europa. Después de cinco años en el Anderlecht, Marc Emmers estaría a punto de afrontar su primera aventura en el fútbol extranjero.
Emmers disputó dos Copas del Mundo con la selección de Bélgica. |
- Se fue a Italia y fichó por un Perugia recién descendido a la Serie B. En su plantilla figuraban nombres como el de un joven Gennaro Gattuso, Milan Rapaic y el joven internacional brasileño Muller. Emmers llegaría para cubrir el flanco derecho.
No tuvo suerte en el Perugia, ya que solamente jugaría en siete ocasiones. Después viajaría a Italia para defender los intereses del AC Lugano, para después retornar a Bélgica para colgar las botas en el modesto Diest de KFC.
Con Bélgica participó en 37 partidos internacionales e hizo 2 tantos. Acudió a dos Mundiales con su selección, el de Italia 90 y el de Estados Unidos en 1994. En ambos torneos, Marc Emmers sumaría tres partidos.
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