De cerca: Gareth Bale.

- Todos conocemos su pasión por el golf, un deporte por el que este galés sacrifica mucho tiempo libre como buen británico que es. Pero también somos conscientes de que a Gareth Frank Bale le apasiona también el fútbol, y buena prueba ha dejado en su paso por clubes como el Southampton, Tottenham Hotspur y Real Madrid.

Con el conjunto blanco juega actualmente y vive momentos amargos que le han puesto contra las cuerdas una y otra vez. Su futuro en España es incierto, aunque el día que se vaya lo hará contando con un palmarés personal bastante atractivo.
Ganador de cuatro Champions en su historial de blanco, también es un jugador importante para el combinado nacional de Gales, con el que ya se acerca a los cien partidos y ha disputado brillantemente la Eurocopa de Francia 2016, en la que el equipo llegó a semifinales siendo él su máximo goleador.

Gareth Bale como jugador del Real Madrid.

- Bien pudo merecer la distinción del Balón de Oro en su carrera deportiva, algo a lo que ha optado y no ha tenido fortuna. En los últimos años nos ha desacostumbrado a su mejor versión, y tiene pie y medio fuera del Real Madrid por sus constantes cambios de humor.
Bale nació el 16 de julio de 1989 en Cardiff (Gales). Su tío Chris Pike fue profesional y jugó para el equipo de su ciudad, por el que nuestro protagonista no tendría que pasar al llamar la atención desde temprana edad. Entonces jugaba para el equipo académico del Eglwys Newydd en Whitchurch, donde llamó la atención de los ojeadores del Southampton mientras jugaba un torneo para el Cardiff Civil Service.
A partir de ese momento, todos eran conscientes de que el joven galés tenía dotes para dedicarse al fútbol pese a que su pronta afición por el golf  acaparase gran parte de su día a día. Como buen jugador de ataque, Bale demostraba tener gol y muchas maneras, un peligroso y rapidísimo jugador que en banda entraba por la defensa rival como cuchillo por mantequilla. Con sus buenas maneras sobre el césped, el joven Gareth se ganaría el derecho de ingresar en el Southampton para iniciar su carrera en el fútbol base del club, en Bath.

Aparte de golf y fútbol, Gareth ya había demostrado en su infancia que era un magnífico atleta. Destacó hockey, fútbol gaélico e incluso obtuvo premios corriendo los cien metros lisos cuando tenía catorce años...  y es que el galés tiene la velocidad del rayo.

Desde finales de los noventa trabajó duro en las filas inferiores del Southampton, llegando al primer equipo en 2006 para debutar como profesional y así batir un récord de juventud por detrás de Theo Walcott.
En la Premier League debutaría bajo las órdenes del técnico holandés Maarten Cornelis Jol, en su fichaje por el Tottenham. Su primera cita en la élite vino ante el Manchester United en Old Trafford, en una derrota por la mínima ante los "Reds" (0-1). Sin embargo, en sus siguientes apariciones haría sus primeras dianas, ante Fulham y Arsenal, respectivamente.

En su primer año con la escuadra de Tottenham contaría para los tres diferentes técnicos que tuvieron que hacerse con las riendas del equipo, pues al holandés le sucedieron en el cargo Clive Allen y el español Juande Ramos.

Bale no tardaría en amoldarse a las exigencias de la competición. Con el paso de los años se iría buscando un hueco en la titularidad, sorprendiendo por sus registros goleadores en sus últimos años como "Spur".
Fue en la campaña 2012\13 cuando el velocísimo "Expreso de Cardiff" batió todos sus propios récords, anotando 21 tantos en la Premier que despertarían la atención de los mejores clubes del planeta. Con 146 partidos en la máxima competición británica, a Gareth le llegaría el momento para cambiar de aires.

Fichó por el Real Madrid en los primeros días de septiembre de 2013, momento en el que pondría rumbo a España para debutar en la Liga Española un 14 de septiembre, en una visita a El Madrigal ante el Villarreal, partido en el que se estrenó como goleador pese a que su equipo no podría pasar del empate (2-2).

Bale ya es el máximo goleador histórico de la selección galesa con 33 dianas.

- No hay duda de que Bale viviría grandes tiempos en Madrid, haciendo muy buenos números personales y conquistando cuatro títulos de Champions, otros cuatro Mundial de Clubes, tres Supercopas de Europa, otras dos españolas, una Copa del Rey y una Liga.
En la Liga Española lleva 80 goles en 167 partidos, unas marcas que están bastante bien. La parte negativa viene en los últimos años, en los que al jugador galés se le ve más fuera que dentro de la disciplina del Real Madrid.

Como internacional está casi todo dicho, ya que con Gales afrontó la única participación importante de su historia con la Eurocopa de Francia 2016. En ésta, su selección llegó a semifinales y Bale fue Balón de Oro del torneo. En total lleva 83 partidos y 33 goles, cifra que seguro incrementará en los próximos años.